Una táctica subestimada de la campaña de Mamdani es su orientalismo intencionado. Él enfatiza *parecer* muy extranjero, desde su logo hasta cómo come arroz. Todo esto se hace de manera intencionada, para (1) atraer a muchos, pero también (2) provocar a sus oponentes a hacer ataques xenófobos de mal gusto.