Una de las formas más fáciles de crear suerte es verse bien. Bien definido, bien vestido, bien cuidado. No importa a dónde vayas, a quién veas, o si siquiera estás viendo a alguien en absoluto Mantén un cierto estándar de excelencia física en todo momento. Dedica tiempo a ello. Gasta dinero en ello. No patrocinado por una necesidad superficial de impresionar, sino para simplemente señalar al mundo que realmente quieres ser parte de él Lo haces por ti mismo. No puedes tener poca agencia si tu apariencia lo contradice directamente. Tu cabello es demasiado bonito, tu atuendo es demasiado impresionante para que te pudras frente a píxeles todo el día. Te sientes demasiado bien como para esconderte detrás de excusas Ejemplifica el respeto propio. Ámate lo suficiente como para que tu mejor versión sea la que predomine. Mírate como alguien digno de atraer oportunidades. Transmite las frecuencias correctas y observa cómo la energía se te devuelve.