Ser amable con otro es recordar la suavidad de cada comienzo... Una vez, todos los seres eran frágiles... llevados por manos que eligieron el cuidado sobre la crueldad, el amor sobre la indiferencia. Cada acto de ternura recuerda esa primera misericordia que permitió que la vida creciera. La gentileza no es simplemente amabilidad.. es un regreso a la fuente, donde todos los corazones eran una vez inocentes.. indefenso.. y tierno como el amanecer.