Nvidia está ahora valorada casi tres veces en todo el sector energético. Casi tres veces. Y no, no genera más beneficios que las compañías energéticas del S&P 500. De hecho, el flujo de caja libre combinado de este sector en el último año es aproximadamente un 20% superior al de Nvidia. La innovación tecnológica es increíble, pero no olvidemos que algo aún tiene que impulsarla.